Llegadas estas fechas parece que se está convirtiendo en algo habitual, (ya que ocurrió el pasado año, y se ha repetido este) que ciertos usuarios del pabellón ocupen la pista (el fondo) para jugar a fútbol sala mientras entrenamos, algo que nosotros queremos evitar en lo sucesivo, y no por capricho, sino porque es necesario.
Nosotros practicamos un deporte minoritario, y disponemos tan solo de dos horas semanales de pabellón, todo ello para un total de 22 niñ@s. Gracias al grupo de mayores que nos ha cedido parte de su hora de los martes, podemos disponer de un rato más (media hora), y el resto de la hora de los martes se ha puesto a disposición de otros. (Futbol sala por supuesto).
El grupo de volei lo forman los 7 niños del año pasado y una niña, además de los 15 nuevos de este año. Entre ellos tenemos niños de categorías prebenjamín, benjamín, alevín, e infantil. Os podéis imaginar que entrenar un grupo tan heterogéneo no resulta nada fácil. De todos es sabido que el pabellón de Jaraíz no tiene unas condiciones acústicas excesivamente buenas, y en él es difícil comunicarse. Para más de 10 niños, casi todo hay que decirlo a voces, lo cual dificulta mucho la tarea de los monitores.
Que yo sepa, los niños de la sección de volei pagan exactamente lo mismo por practicar volei que los del tenis o los de fútbol sala, por lo que creo debería corresponderles la misma proporción de tiempo (lo cual dudo mucho que se cumpla). Además supongo que no es muy difícil averiguar cuál es el porcentaje que se destina a cada deporte en el pabellón (90% futbol sala).
Yo creo sinceramente que disponéis de pistas (al menos 5 en jaraíz) y tiempo suficiente para jugar (al margen de nuestras dos horas os quedan 166 horas a la semana), por lo cual considero que no debería utilizarse nuestro tiempo y nuestra pista. Además, a mi nunca se me ha ocurrido entrar a jugar a volei en el pabellón cuando estáis jugando la liga de futbol sala, o en un entrenamiento, ya que está fuera de duda, al menos para mi, que no me asiste ningún derecho. Sobre todo si lo hago sin tan siquiera haber consultado con el responsable del entrenamiento, como ustedes hacen (ya digo que no una, sino muchas veces).
Ya estamos un poco cansados de que los aficionados al fútbol sala (no todos) nos estén jorobando continuamente. Así comentarios como si Emérito hace el cambio de pista un minuto antes de las siete alguno nos va a enseñar a hostias lo que vale una hora, o que las madres y padres de ciertos niños amenacen con subir a ver al concejal por que un día el monitor del Ayuntamiento y yo estuvimos sacando los postes por un lateral durante su entrenamiento, que son por cierto los mismos niños que cuando acaban los entrenamientos se quedaban después tirando tiros a puerta en nuestra hora.
Lo que deben hacer ustedes es RESPETAR A LOS DEMÁS, porque aunque no sepamos jugar, o no seamos tan buenos como ustedes, si queremos disponer de nuestro tiempo para nosotros. NO CREO QUE ESTO SEA DIFÍCIL DE ENTENDER.
Parece que en este pueblo solo exista el fútbol, y que todo el que pretenda practicar otra cosa sea algo así como un bicho raro o un paria. A ver si os enteráis de una vez que el mundo no acaba ahí, y que hay muchas otros deportes, algunos tan buenos o mejores que el vuestro en muchos aspectos.
Nosotros practicamos un deporte minoritario, y disponemos tan solo de dos horas semanales de pabellón, todo ello para un total de 22 niñ@s. Gracias al grupo de mayores que nos ha cedido parte de su hora de los martes, podemos disponer de un rato más (media hora), y el resto de la hora de los martes se ha puesto a disposición de otros. (Futbol sala por supuesto).
El grupo de volei lo forman los 7 niños del año pasado y una niña, además de los 15 nuevos de este año. Entre ellos tenemos niños de categorías prebenjamín, benjamín, alevín, e infantil. Os podéis imaginar que entrenar un grupo tan heterogéneo no resulta nada fácil. De todos es sabido que el pabellón de Jaraíz no tiene unas condiciones acústicas excesivamente buenas, y en él es difícil comunicarse. Para más de 10 niños, casi todo hay que decirlo a voces, lo cual dificulta mucho la tarea de los monitores.
Que yo sepa, los niños de la sección de volei pagan exactamente lo mismo por practicar volei que los del tenis o los de fútbol sala, por lo que creo debería corresponderles la misma proporción de tiempo (lo cual dudo mucho que se cumpla). Además supongo que no es muy difícil averiguar cuál es el porcentaje que se destina a cada deporte en el pabellón (90% futbol sala).
Yo creo sinceramente que disponéis de pistas (al menos 5 en jaraíz) y tiempo suficiente para jugar (al margen de nuestras dos horas os quedan 166 horas a la semana), por lo cual considero que no debería utilizarse nuestro tiempo y nuestra pista. Además, a mi nunca se me ha ocurrido entrar a jugar a volei en el pabellón cuando estáis jugando la liga de futbol sala, o en un entrenamiento, ya que está fuera de duda, al menos para mi, que no me asiste ningún derecho. Sobre todo si lo hago sin tan siquiera haber consultado con el responsable del entrenamiento, como ustedes hacen (ya digo que no una, sino muchas veces).
Ya estamos un poco cansados de que los aficionados al fútbol sala (no todos) nos estén jorobando continuamente. Así comentarios como si Emérito hace el cambio de pista un minuto antes de las siete alguno nos va a enseñar a hostias lo que vale una hora, o que las madres y padres de ciertos niños amenacen con subir a ver al concejal por que un día el monitor del Ayuntamiento y yo estuvimos sacando los postes por un lateral durante su entrenamiento, que son por cierto los mismos niños que cuando acaban los entrenamientos se quedaban después tirando tiros a puerta en nuestra hora.
Lo que deben hacer ustedes es RESPETAR A LOS DEMÁS, porque aunque no sepamos jugar, o no seamos tan buenos como ustedes, si queremos disponer de nuestro tiempo para nosotros. NO CREO QUE ESTO SEA DIFÍCIL DE ENTENDER.
Parece que en este pueblo solo exista el fútbol, y que todo el que pretenda practicar otra cosa sea algo así como un bicho raro o un paria. A ver si os enteráis de una vez que el mundo no acaba ahí, y que hay muchas otros deportes, algunos tan buenos o mejores que el vuestro en muchos aspectos.
P.D. Este mensaje no es extensivo a todos los aficionados al fútbol sala. Creo que el que lo lea sabe de sobra a quién va dirigido.
